El presidente Russell M. Nelson ha puesto un repetido énfasis en el recogimiento de Israel — un concepto que se ha expandido enormemente a través de la restauración de la Iglesia de Jesucristo y el Libro de Mormón.
Este recogimiento se refuerza mediante la obra del templo y la historia familiar, los esfuerzos misionales y la ministración, enseñaron los líderes durante la conferencia general de abril de 2023.
El élder Quentin L. Cook del Cuórum de los Doce Apóstoles dijo que el Padre Celestial desea que Sus hijos se reúnan a salvo en su hogar. El plan de Dios se basa en la rectitud, el guardar Sus mandamientos, recibir ordenanzas y honrar los convenios.
“Quienes aceptan el evangelio de Jesucristo, independientemente de su linaje, se convierten en parte del Israel congregado. Con dicho recogimiento y los numerosos templos construidos y anunciados, estamos en una posición inigualable de recoger a Israel a ambos lados del velo como nunca antes en el plan del Padre”, dijo el élder Cook durante la sesión del sábado por la mañana.
Los miembros y los misioneros en todo el mundo están incrementando los esfuerzos para reunir al Israel disperso, y el crecimiento continúa en todas partes. “Sin embargo, nuestro compromiso de amar, compartir e invitar puede aumentar en gran manera”, dijo.
“Mi ruego específico hoy es que cada niño, niña, jovencito, jovencita, familia y cuórum, Sociedad de Socorro y clase evalúe cómo aceptamos individual y colectivamente el impresionante consejo de ayudar a recoger a Israel que nos han dado el Señor y nuestro amado Profeta”.
Testificar de Cristo puede invitar a otros a aprender más sobre Él. En su discurso del sábado por la mañana, Bonnie H. Cordon, la presidenta general de las Mujeres Jóvenes, compartió un consejo que le dio su padre: “Bonnie, nunca dejes pasar la oportunidad de testificar de Cristo”.
Ella dijo que, al igual que otros, ella ha testificado de Cristo durante una reunión de ayuno y testimonio, ha dado testimonio de las verdades del evangelio como parte de una lección y enseñó sobre Cristo como misionera.
“¡Pero aquella petición se sentía más personal!”, dijo refiriéndose a su padre. “Fue como si me dijera: “¡Bonnie, no permitas que el mundo te supere! Permanece fiel a tus convenios con el Salvador. ¡Busca sentir Sus bendiciones cada día y sé capaz de testificar por medio del Espíritu Santo de Su poder y presencia en tu vida!”.
El recogimiento de Israel incluye la obra en el templo y de historia familiar, de la cual habló el élder Benjamín De Hoyos, Setenta Autoridad General, durante la sesión del sábado por la tarde.
“Sin embargo, recordemos que la historia familiar va más allá de solo buscar nombres, fechas y lugares; es unir las familias y sentir el gozo que viene de extenderles las ordenanzas del Evangelio”, dijo. “Ciertamente, la obra del templo y de historia familiar son una misma obra en la Iglesia”.
Conforme las personas se reúnen en torno al Evangelio, avanzan en la senda del convenio al hacer convenios y honrarlos.
El élder Dale G. Renlund del Cuórum de los Doce Apóstoles, explicó durante la sesión del sábado por la tarde, que Dios estableció los convenios como el medio para que Sus hijos pudieran reunirse con Él. “Un convenio es un compromiso para el cual debemos prepararnos, que debemos comprender claramente y honrar absolutamente”, dijo.
Hacer un convenio con Dios es diferente de hacer una promesa a la ligera, dijo el élder Renlund, se requiere la autoridad del sacerdocio.
“Solo hacemos el convenio cuando tenemos la intención de comprometernos a cumplirlo de un modo considerablemente excepcional8. Llegamos a ser hijos de Dios por convenio y herederos de Su reino, en especial, cuando nos identificamos completamente con el convenio”, dijo el élder Renlund.
Honrar los convenios, les proporciona a las personas la fortaleza para resistir los desafíos y sufrimientos de la mortalidad. Además, la doctrina relacionada con los convenios proporciona esperanza, consuelo y paz.
En la sesión del domingo por la mañana, la presidenta general de la Sociedad de Socorro, Camille N. Johnson, habló sobre la conexión entre los convenios y el socorro. “Los que guardan los convenios son bendecidos con el alivio del Salvador”, dijo ella.
El recibir su bendición patriarcal condujo al élder Randall K. Bennett, Setenta Autoridad General, a estudiar los convenios que había hecho y las bendiciones prometidas en el convenio de Dios con Abraham. “Me brindó una perspectiva eterna que me inspiró a guardar mis convenios más plenamente”, dijo el élder Bennett durante la sesión del sábado por la tarde.
El hermano Milton Camargo, primer consejero de la presidencia general de la Escuela Dominical dijo en la sesión del sábado por la noche, que los convenios ayudan a centrar nuestra atención, nuestros pensamientos y nuestras acciones en Cristo.
También dijo que adherirse a los convenios invita al cambio. “Guardar los convenios nos lleva a procurar todo aquello que propicie la influencia del Espíritu y a rechazar cualquier cosa que la aleje”.
Ministrar a los hermanos y hermanas puede invitar a otros a hacer y honrar los convenios sagrados.
El élder Gerrit W. Gong del Cuórum de los Doce Apóstoles dijo que, una ministración inspirada puede bendecir a las personas individualmente y como familia por generaciones. También puede fortalecer a los barrios y las ramas.
“En muchos lugares, podemos tender una mano a los demás, comprender cuál es su situación actual y cultivar relaciones cuando visitamos a los miembros en sus casas con regularidad. Las invitaciones inspiradas cambian vidas. Cuando las invitaciones nos ayudan a hacer y a guardar convenios sagrados, nos acercamos más al Señor y a los demás”, dijo el élder Gong durante la sesión del sábado por la mañana.
Sin embargo, en algunos lugares de la Iglesia hay una brecha en la ministración. Hay más personas que dicen que están ministrando que las que dicen que están siendo ministradas. El élder Gong dijo que debemos ver al Salvador Jesucristo como el perfecto ejemplo de cómo ministrar.
“Al ministrar como Él lo haría, testificamos de Sus bendiciones y milagros”, dijo.
El élder Juan A. Uceda, Setenta Autoridad General, habló el sábado por la noche sobre llegar a ser pastores del Señor Jesucristo al ministrar al uno.
Compartió la historia que se encuentra en Lucas 15: La parábola de la oveja perdida, la parábola de la moneda perdida y la parábola del hijo pródigo.
¿Podemos percibir la urgencia en el corazón del hombre que perdió solamente una oveja? ¿O la urgencia en el corazón de la mujer que perdió solamente una moneda? ¿O el inefable amor y compasión en el corazón del padre del hijo pródigo?”, preguntó el élder Uceda.
Citando un discurso sobre la ministración que ofreció el presidente Russell M. Nelson durante la conferencia general de abril de 2018, el élder Uceda señaló que una característica distintiva de la iglesia verdadera y viviente del Señor será siempre un esfuerzo organizado y dirigido a ministrar a los hijos de Dios individualmente y a sus familias.
“Puesto que esta es Su Iglesia, nosotros, como sus siervos, hemos de ministrar a la persona en particular tal como Él lo hizo. Ministraremos en Su nombre, con Su poder y autoridad, y con Su amorosa bondad”, citó el élder Uceda de dicho discurso,
Después de dar ejemplos sobre cómo la ministración bendice la vida, el élder Uceda concluyó diciendo: “Testifico que, con la ayuda de nuestro Salvador, podemos amar a Sus preciadas ovejas y ministrarles como Él lo haría”.
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